"Éramos pocos y parió mi Abuelaaaaaaaaaa". ¡A los botes!

Desopilante encuentro entre Maradona, Guillermo Moreno y Bonafini

“Dios lo cría y el viento los amontona”, dice un viejo refrán que sirve para describir a la perfección lo que ocurrió ayer, cuando se juntaron dos de los personajes más polémicos y denunciados del kirchnerismo: Hebe de Bonafini, titular de Madres de Plaza de Mayo, y el exsecretario de Comercio, Guillermo Moreno.
La frutilla del postre fue Diego Armando Maradona, un personaje que resulta un poco difícil de encasillar políticamente, ya que en los años 90 apoyó a Carlos Menem y hasta llegó a ponerse una camiseta con la cara de Domingo Cavallo, aunque al mismo tiempo elogiaba al Che Guevara y Fidel Castro. También estuvo cerca de Fernando de la Rúa, para luego sumarse al kirchnerismo y al chavismo, lo que le permitió acceder a contratos millonarios en el Mercosur.
El lugar de encuentro fue un programa radial, que se transmite on line y que conduce Moreno. Los tres criticaron el “tarifazo” del Gobierno y se preguntaron “cómo hace la gente hoy para vivir” con los aumentos de precios.
Fue tan desopilante el diálogo de estos personajes que Maradona llegó a decir que tiene que recurrir a uno de los máximos exponentes del relato K, Víctor Hugo Morales, para enterarse de lo que sucede en el país. El exjugador de la Selección argentina está radicado en Dubai.

“Yo necesito que un Víctor Hugo me cuenta la verdad de lo que pasa. Yo estoy en Dubai y me llegan noticias de que la gente no puede vivir, yo no lo puedo creer. Se llevaron por delante todas las cosas que nos dejaron Néstor y Cristina”, dijo Maradona. Y como si fuera poco agregó: “A Cristina Kirchner la quieren meter presa por hacer las cosas bien”.
Como si fuera poco, Guillermo Moreno no dudó en ovacionar las declaraciones de Maradona y hasta se animo a entonar el cántico archiconocido “Maradó, Maradó…”. Y luego hizo una bajada de línea política al sostener que “no imaginaba un escenario así en tan poco tiempo”, en relación a la situación económica del país.
Lo que no se escuchó fue una sola autocrítica. Nada dijo Hebe de Bonafini sobre los graves casos la corrupción que la involucran, mientras que Moreno tampoco se refirió a los resultados de sus políticas que, con la restricción a las importaciones, llevó a la Argentina a una aguda recesión, lo que se sumó a la destrucción del sistema estadístico nacional y la desaparición de miles de productores ganaderos por las trabas para exportar.

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