La noche joven, vista por un joven

La noche, el rol que a cada uno le cabe.
Día del estudiante, día de la primavera, día de festejo, día que durante décadas fue la excusa ideal para salir con amigos y pasar una jornada de distensión y alegría, pero  hace varios años que viene perdiendo tal carácter y lamentablemente se va tiñendo de rojo. Quien les habla tiene 25 años, ha disfrutado de la noche, ha salido, se ha divertido e incluso ha trabajado en distintos locales bailables y es aquí donde ha tomado conciencia de lo que era y es la noche. Es increíble como cambia la vista cuando uno pasa de ser un participante de la noche, a una especie de espectador, la vista les aseguro, es increíble.

Soy bonaerense de cuna, más precisamente quilmeño. En esta localidad la costumbre es festejar el día de la primavera en el famoso parque cervecero
, el cual es un hermoso parque público ubicado detrás de la cervecería Quilmes. La última vez que asistí al festejo allí realizado fue la vez que con mis amigos y  dijimos, nunca más”. Esto fue en el año 2007 y se debió a que las conocidas ‘’corridas’’ , que son escaramuzas entre colegios o escuelas que tenían ‘’pica’’ fueron constantes, intensas y peligrosas literalmente, Y no se podía estar tranquilo.

El rol del joven.

Durante la madrugada del 21 de septiembre una ‘’fiesta’’ si se la puede llamar así realizada en la localidad de Moreno, dejó un saldo de 14 heridos y un muerto. Cuando la consigna  del evento era ‘’trae tus armas y tus drogas’’ y asisten casi mil personas, el saldo resultante más que una tragedia resulta un milagro al no ser más numeroso.

Los organizadores de dicho evento, invitaban a jóvenes de todas las edades vía redes sociales, literalmente a "destangarnos mucho más de lo que ya lo hacemos siempre", no sorprende que exista gente inescrupulosa que para ganar dinero busque esquivar habilitaciones, pago de impuestos, controles de horarios, nivel acústico, controles sanitarios, etc
., lo que asombra es que se convoque a una clara masacre y los jóvenes a sabiendas asistan voluntariamente.

Asombra a todos el carácter autodestructivo de la juventud en general, resulta inverosímil que un joven sea invitado a un evento a llevar armas y drogas y no pueda prever el resultado lógico de tan letal combinación. Me pregunto, que espera un joven al llevar armas y
drogas?. Es que utilizando estos elementos se divierte más? No logra darse cuenta de que pone en riesgo su salud e incluso su propia vida? No logra ver las posibles consecuencias de sus actos?

Ampliando un poco el espectro, parece haber cambiado el objetivo buscado en la noche, ya no es divertirse, no es conocer una pareja, pareciera que ahora es  reventarse. Los jóvenes llegan al boliche luego de la "previa" es decir, llegan al boliche casi alcoholizados para lograr este cometido a bajo costo dentro del establecimiento. Invito al lector, este domingo ponga Crónica TV a la mañana, a ver cuántos accidentes de tránsito increíbles ocurrieron durante la madrugada. Es que el joven sale, toma hasta desfallecerse y luego retorna al hogar literalmente, como puede. Cada vez es más común la utilización de distintos tipos de drogas desde marihuana, pasando por drogas sintéticas y terminando por cocaína, heroína y ácidos para los más atrevidos.

Consejo de un joven a otro. Por tomar hasta caerte no vas a ser mejor, no vas a ser mas copado, piola o popular. Pero seguro que las probabilidades de que esa noche la termines mal, aumentan notablemente. Salí para pasarla bien no para reventarte, no se termina el mundo, mañana sale el sol y es un nuevo día. No arruines tu futuro consumiendo drogas
, las consecuencias pueden ser terribles, el que te ofrece drogas no busca tu beneficio, busca un cliente o un cómplice, no esperes que te cuiden los demás. Tus viejos y tu familia te están esperando en casa, acordate. 

Los padres.

Con los excesos ocurre lo previsible, sobredosis, accidentes de tránsito, peleas callejeras, heridos e incluso muertes. Y es en este punto donde se buscan responsables, según los padres de dichos jóvenes sus hijos NUNCA tuvieron responsabilidad alguna y ellos no sabían nada.

La noche comienza en las famosas ‘’previas’’ que son realizadas en las casas de los padres de los jóvenes, quienes so pretexto de que es mejor que tomen en casa a que estén en la calle, permiten el consumo de cantidades industriales de alcohol a sus hijos y amigos e incluso, acompañan a comprar para lograr algún descuento en supermercados.


De aquí los jóvenes, muchas veces menores, se trasladan a otro punto, a veces a un bar otras a un local bailable, y muchas veces, los padres no saben a dónde. Hay un límite complejo entre el control y la invasión en la privacidad del adolescente, pero cuando vemos que un adolescente o casi niño de 12 años fue encontrado en una fiesta, no deslindemos culpas en terceros, una fiesta nocturna donde abunda el alcohol no es el ámbito para un menor de esas edades.
Habiendo transitado la noche, los jóvenes deben retornar a sus hogares como pueden. No solo por el estado de cansancio absoluto sino por la falta de transporte público, en los horarios en que se sale de los boliches, en invierno se encuentra la total penumbra, los remiseros no quieren trasladarlos en muchos casos, por exceso de alcohol o por el riesgo de robo. Los colectivos son escasos y siempre hay que caminar, imagine a un joven exhausto a las 5 de la mañana caminando por la calle y estará imaginando a la víctima ideal de un ladrón.
Consejo de un joven a un padre. La noche cambia a un ritmo increíble, la noche de este sábado es otro mundo, respecto a la del mismo sábado de hace 5 años, imagínese lo que ha cambiado respecto a las noches de su juventud. Cuide a su hijo, de terceros pero por sobre todo, de si mismo. La noche es un mundo oscuro lleno de tentaciones peligrosas, donde se entra y es muy difícil salir. No espere que el dueño o el organizador de un evento cuide el límite de edad, cuide la cantidad de alcohol ingerida por cada cliente, cuide cómo y con quien se va del establecimiento, su naturaleza es hacer dinero, la del padre velar por su hijo, nadie lo va a hacer mejor que usted. Pregunte, investigue y por sobre todas las cosas, si debe elegir entre discutir o no, es mejor hacerlo a pasar un domingo lamentándose en un hospital.

El estado.

El rol del estado en la noche es nefasto, cómplice, entregador y cínico. Desde el punto de vista de la prevención, realiza campañas excelentes en contra del tabaco y contrariamente permite publicitar bebidas alcohólicas alentando a su consumo.  Nos debe a todos un rol activo, permanente e indelegable respecto al consumo de alcohol, especialmente en los sectores de jóvenes en edades más vulnerables. Es increíble que ante el aumento escandaloso de consumo del alcohol, no se vean medidas en concreto y se tire la pelota afuera. Necesitamos un compromiso de las autoridades, municipales, provinciales y nacionales.

Igual caso para las drogas, se le exige al dealer que no venda en vez de enseñarles a los jóvenes que no compren. Sin consumidores, no hay vendedores. Ambas tareas deben realizarse por igual, sancionando penalmente al dealer y e
nseñando a los jóvenes desde el sistema educativo. Incluso desde la primaria debe realizarse una constante actividad militante contra las drogas, contra TODAS ellas. Deben tener en claro que son una cárcel y no una liberación. Es fundamental el rol de los maestros y profesores, pero también es imperiosa la intervención de asociaciones civiles como alcohólicos anónimos o narcóticos anónimos que llevan hace años una lucha heroica e incansable contra las adicciones y tienen muchísimo para enseñarnos respecto a ellas. 

Los dueños de los locales bailables aportan jugosas coimas a inspectores municipales e incluso realizan aportes a campañas electorales a fin de evadir controles, esquivar los horarios establecidos de ingreso y egreso, permitir el ingreso de menores y hasta en algunos casos, el aval para la venta de estupefacientes.

Si algún joven lee esta nota, podría reflexionar pensando en cuantas veces vio al personal municipal dentro del boliche mientras que también veía menores de edad dentro y sabrá darme la razón.
La policía brilla en este caso, pero por su ausencia. Parece ser un actor protagónico que falta consecutivamente a su obra, coimas, negligencia, falta de capacitación, falta de procedimientos claros, inoperancia y mucho más forma parte del libreto. Los controles de alcoholemia que supieron florecer hace unos años se marchitaron con la misma intensidad de su aparición, pareciera que el único fin de la bonaerense después de caer el sol, fuera hacer caja cobrando multas.


Por último y para no extenderme, si algún funcionario lee me gustaría dejar mi último consejo.

Consejo de un joven para el estado y/o cualquiera de sus representantes. No nos maten, no nos dejen morir, valemos más que una coima. Cualquier pibe muerto vale más que una elección. Somos sus hijos, sus nietos, sus sobrinos vivimos donde ustedes gobiernan, no nos suelten la mano, con una sana juventud, vamos a tener un gran futuro. 

Matías Perez
Abogado

Comentarios