Vidal enfrentó a Sturzenegger y ordenó que los estatales sólo cobren por el Bapro
Los senadores de Cambiemos aprobaron ayer un proyecto impulsado por el peronismo por el cual el Banco Provincia volverá a ser la única banca con potestad para pagar sueldos a los trabajadores estatales.
El proyecto fue impulsado por Patricio García, presidente del bloque Peronista en el Senado, pero tenía el aval de María Eugenia Vidal; el ministro de Economía, Hernán Lacunza, y el presidente del Banco Provincia, Juan Curutchet.
El proyecto -que fue girado a Diputados- choca con la circular A 6042 del Banco Central, firmada por Federico Sturzenegger en agosto de este año que le concede a los trabajadores la facultad de elegir la entidad financiera en la que su empleador le deberá depositar sus haberes.
La medida de Sturzenegger favorecía directamente a los bancos privados, pero perjudicaba a las entidades bancarias nacionales como el Nación y el Bapro.
“El Bapro nunca se piensa como un negocio y se piensa desde el punto de vista social. Quizás no tenga la mejor atención. Por ahí no tiene el mejor aire acondicionado, pero es nuestra banca y cuando hay que dar créditos de riesgo los otorga a una tasa de interés que ninguna banca privada otorga”, dijo García durante la sesión.
El proyecto se basa en las facultades provinciales que surgen del Pacto de San José de Flores de 1859, instrumento reconocido constitucionalmente al momento de la incorporación de la Provincia de Buenos Aires al resto de la Confederación Argentina.
“No es la intención perjudicar a otras entidades, sino que se trata de una razonable limitación que atiende a la naturaleza de banca social del Bapro”, dijo García.
Según números de agosto, el Nación posee poco más de 1,3 millón de cuentas y apenas 4.000 empresas adheridas, lo que le permite hacerse del 16% de share.
Luego se ubica otra entidad pública: el Banco de la Provincia de Buenos Aires, con poco más de 1 millón de cuentas y 11.000 empresas. Dispone así del 12% de share. Le siguen Santander Río, con 784.000 cuentas y unas 35.000 empresas, que le permite reunir el 9% del mercado, y el Galicia, luego el Macro y BBVA Francés. Sólo estas seis entidades dominan el 60% de las cuentas sueldos que existen en el país.
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