Se recupera el joven que fue mordido por una Yarará en Playa Norte


El joven sanclementino de 19 años que circulaba en moto por el circuito de Playa Norte en compañía de un amigo y que fue mordido por una Yarará está en su domicilio y continúa con su recuperación. Junto con su madre, Claudia Corsini, relataron lo sucedido a Faro Noticias y dieron algunas pautas a tener en cuenta en casos similares.



El sábado 1 de abril, Federico Medina se encontraba andando en moto con un amigo en el circuito de areneros de Punta Rasa, cuando en un alto de la actividad, fue mordido por una víbora. “Estábamos en playa Norte; cuando paramos para dejar descansar las motos y que se enfríe el motor, me bajé y me puse a ver el vidrio de la camarita del casco. Habré estado 15 o 20 minutos. Después me puse a dar vueltas alrededor de la moto, y en un momento dado, fui a agarrar un pedazo de alambre porque se me perdió un tornillo. Al agarrar el alambre sentí que me mordió la víbora en la pierna derecha. Al principio pensé que era un tábano. Quise matarlo, y al mirar, vi que tenía la mano con sangre. Enseguida miré la pierna y noté las marcas de los colmillos, la pierna me sangraba. La víbora estaba atrás mío, enroscada como para volver a atacar. Me asusté mucho, quise agarrar el casco para pegarle y matarla, pero ya se había ido. De ahí nos fuimos con mi amigo rápidamente al hospital con las motos. Los médicos tuvieron que buscar en Internet cómo proceder ante la mordedura de una yarará. A partir de ahí quedé internado en la guardia, me pusieron un suero con antibióticos hasta que llegó el suero antiofídico, que fue traído desde Mundo Marino”, comenzó diciendo el joven de 19 años.
Su madre, Claudia Corsini, contó que, por consejo de un médico, fueron a ver a un especialista en Dolores. “El doctor felicitó al personal del hospital por el modo en que había sido atendido Federico, dijo que todo lo que le hicieron estuvo perfecto, más allá de la inexperiencia del caso, ya que esto es algo que no pasa siempre. Mi hijo estuvo bien atendido”, indicó a FaroNoticias.

“Este médico estuvo realizando estudios en distintas partes de la Costa. Entre Punta Rasa y Playa Norte hay una gran cantidad de estos ofidios, puesto que acá se reproducen. Nos comentó que, si la víbora no es atacada o no se siente amenazada, no muerde. En este tipo de casos, lo primero que hay que hacer es recurrir inmediatamente al hospital. Acá no había suero antiofídico, pero sí había en Mar de Ajó, donde existe una terapia intensiva. De todos modos, Mundo Marino también tenía, y si no hubiese sido por eso, tendríamos que haber hecho 60 kilómetros para que le colocaran ese suero”, exclamó la madre, quien agregó que, al ver la mordedura, el especialista consideró que puede tratarse de una yarará de la cruz.


Según Corsini, la vida de su hijo está fuera de peligro. Sin embargo, se formó una necrosis en el tejido afectado, razón por la cual Federico está tomando distintos remedios. “Si el cuadro se agrava habrá que tratar la infección. Por ahora haremos otra consulta en Dolores y estaremos atentos por si hay que internarlo nuevamente”, aseguró.
Así mismo, remarcó que lo sucedido debe ser tenido en cuenta por quienes circulen por la zona: “Hay que tener precaución y mirar dónde estamos parados, no tenemos que andar entre los yuyos. Siempre hay que ir acompañado por lo que pudiera llegar a ocurrir. Si Federico hubiera estado solo y se hubiera desmayado, nos podría haber costado encontrarlo. Gracias a su amigo, que lo acompañó, y a la actuación de los médicos, pudo salvar su vida”, finalizó.

faronoticias.com.ar

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